"El viaje en el tiempo es la clase de historia de ciencia-ficción que este escritor prefiere". Eso dijo el propio Byrne en relación a OMAC: Ejército de un solo hombre, proyecto que realizó para DC en 1991, a la vez que trabajaba para Marvel en Namor The Submariner. Precisamente las tramas o craftin que con Namor experimentó y abandonó por no dar todo el buen resultado esperaba, las volvería a emplear en esta serie, en blanco y negro, y, según el mismo Byrne, por ello más adecuado su utilización nuevamente.
Ya anticipamos esa debilidad de Byrne por los viajes en el tiempo. En OMAC la base argumental precisamente se basa en este concepto y convierte la historia primigénia de aventuras y acción trepidante de Jack "The King" Kirby en una cien por cien de pura ciencia-ficción. De hecho, esta miniserie de cuatro números -de cuarenta y cinco páginas cada uno- está dedicada a Kirby.
De hecho, en esta ocasión Byrne se preocupó por no desmontar el universo de Kirby, ni parcheó sus orígenes e ideó un final que dejaba todo lo concebido por Kirby tal cual. Paradojas temporales a parte, claro.
¿Recordáis aquella historia de Los 4 F donde éstos viajaban al pasado, concretamente a la Alemania nazi de 1936, y Nick Furia intentaba asesinar a Hitler? Pues parte de esta idea vuelve a ser retomada en esta serie.
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